sábado, 24 de enero de 2015

Brújulas que buscan sonrisas perdidas.

Hoy os traemos una reseña de un libro que ha superado el millón de ventas, titulado Brújulas que buscan sonrisas perdidas, de Albert Espinosa.

   Trata de un hombre llamado Ekaitz, que acaba de perder a su mujer en un accidente de coche y le deja a cargo de dos gemelas. De pronto se encuentra con que tiene que estar a cargo de su padre, terminal y con Alzheimer. Al principio no quiere cuidar de él, porque cuando era pequeño, no le dejó despedirse de su madre que se estaba muriendo. Va contractando su infancia con el presente.

   Desde mi punto de vista este libro es muy filosófico porque nos habla sobre la madurez y todo lo que conlleva el amor, perdón, venganza, decepción y frustración.

   Aquí os dejamos algunas de las frases más importantes de este maravilloso libro.

"Las grandes cosas están hechas de las pequeñas. Si cuidas las pequeñas cosas, las convertimos en grandes"
"Deberían existir abogados que te pudieran ayudar a desligarte de las promesas de adolescencia alegando incapacidad emocional"
"Somos traumas de la infancia... lo que te prohibieron, lo que no te dieron, lo que te obligaron a aceptar y lo que te arrebataron crea tu carácter"
"Hay veces en la vida que las piezas tan solo se colocan cuando estás preparado para comprenderlas"

Calificación:
Le doy cuatro estrellas.

Brújulas que buscan sonrisas perdidas | Albert Espinosa

domingo, 18 de enero de 2015

Llaman puta a un ángel caído.


Una vez más despierta en un banco, cogiendo aire entre copos de nieve que arde en sus pulmones, con los labios rotos y el rostro pálido. Noches largas con hombres desconocidos. La lucha para pagar el alquiler vuelve a empezar. Sentada en el suelo con un vaso vacío a su lado ve la vida pasar, niñas llorando porque sus padres no le compran el juguete que querían, gente con trajes y maletines, parejas compartiendo un batido, personas que pasan y se quedan mirándola, quizás es lástima o quizás les hace gracia. Recorre la ciudad con una manta liada en su pequeño cuerpo, y unas ojeras más grandes que su cara. Monedas, billetes, la mirada perdida, prostituta sin teléfono. Intenta mantenerse a flote pero rompe a llorar. Débil cae como un castillo de naipes. Ella dice que está atrapada en un sueño. Ha sido así desde los 18, espera despertar. Ultimamente su cara parece que se está hundiendo lentamente, desmoronándose. Las peores cosas de la vida vienen con nosotros. Ella no quiere salir esta noche. Vende su amor a otro hombre, dicen que ella le pega a lo más duro. Enciende un par de velas para calentar sus piernas. Hace demasiado frío fuera para que los ángeles vuelen. Un ángel morirá cubierto de blanco, con los ojos cerrados esperando una vida mejor.

sábado, 29 de noviembre de 2014

-finales, felices-

La niña que creía en los cuentos de hadas,
en los finales felices,
que soñaba con casarse con un príncipe azul,
que pensaba que todo era de color rosa.
Esa niña creció, fue cambiando sus chucherías por cigarrillos.
Sus muñecas por alcohol y drogas.
Se dio cuenta de que los cuentos de hadas no existen, ni los príncipes azules, ni los finales felices.
No todo sale como se planea,
de pequeña te pintan una vida perfecta de color rosa, y cuando creces ves que todo es negro.
Disney se empeña en esconder todo lo negro, pero ¿os imagináis a Rapunzel con cáncer? ¿a Blancanieves cuidando a siete bebés y siendo maltratada por su príncipe? ¿a Cenicienta llegando de madrugada a su castillo drogada? ¿a la sirenita encerrada en una pecera?¿a la Bella durmiente durmiendo todo el día para pasar el menor tiempo posible en este mundo? ¿a Bella operándose todo el cuerpo porque ya no se ve bonita?
Los finales felices existen, en los cuentos.

viernes, 28 de noviembre de 2014

I'm still waiting...

I'm still waiting:
For the right moment to show my bad-assness
For my letter from Hogwarts
For the chance to break down the walls around me
For my artistic ability to save the world
For a nice piece of jewelry to take me on an adventure
For the chanceto stick me to the man
For my Hazel or Augustus
For an explination for my divine awesomeness
For the chance to live forever
For that one special wardrobe
For my caster powers
For the right moment to start a revolution

But until then,
I just read another good book.

domingo, 23 de noviembre de 2014

Estaba loca, loca de remate..

Estaba loca, loca de remate,
y era guapa, guapa de cojones,
y conocía a la luna,
y bailaba rock&roll frente al espejo,
y salía
y bebía
y no se acordaba de nada al día siguiente.

Estaba rota, tanto como un trapo,
y era dura, dura de roer,
y odiaba a los poetas,
y se ponía hasta el culo
y lloraba
y se corría
y no se acordaba de nada al día siguiente.

Dormía poco,
y tenía las ojeras más preciosas que habían ignorado jamás.
Era la princesa de mi cuento,
la que me follaba con Extremoduro sonando de fondo
y se metía de todo, menos mis drogas.

Amaba,
era capaz de amar,
por encima de cualquier boca despeinada,
de cualquier trovador de mierda,
de cualquier basura literaria que le escribía,
era jodidamente perfecta,
y su único defecto era yo.

Así  que qué más os voy a decir,
si fue un placer que me rompiera el corazón.

sábado, 22 de noviembre de 2014

tan fría que incluso ella tiritaba..

¿Qué a pasado con la chica que se comía el mundo? Esa que se reía por todo, que tenía el mundo bajo sus pies, esa a la que le encantaba echarse fotos poniendo morritos y salir cualquier noche a bailar. Aquella chica, sí, la que a pasado de comerse el mundo a llenarse el estómago de comida para luego vomitarla, esa que se pinta una sonrisa para salir de casa y al llegar hunde la cabeza en la almohada hasta dormirse llorando. Sí, la que odia su cuerpo y mirarse al espejo porque sus ojos se han olvidado de la chica preciosa que era para verse horrible. La que pasó de salir todas las noches a quedarse en casa llorando, vomitando y cortándose los brazos. Sí, ha pasado de comerse el mundo a dormir el mayor tiempo posible porque es lo más parecido a morirse, pero que no os engañe verla respirar, ella por dentro está muerta.

pero no, ya no..

Es invierno.
Voy por la calle temblando pero no voy a verte.
Tengo los labios rojos y no es por jugar a mordérnoslos.
Empieza a llover, pero las gotas no caen del cielo.
Siento que algo me abriga, pero no, no son tus brazos.
Tengo un nudo en la garganta que no me deja respirar y, no, no es porque no sé que decirte para el romper el silencio entre beso y beso.
La gente me mira, pero ya no me ven caminar de la mano con alguien.
Tengo una curva, que se ha ido hacia abajo al no sentir tu voz susurrarme al oído.
Te veo por la calle y ya no corro hacia tus brazos a encontrarme con tu boca, no, ya no. Ya solo me queda mirarte a lo lejos y agachar la mirada al verte pasar.
Porque algo estamos haciendo mal si el invierno nos acaricia más de lo que lo hacemos nosotros.